Sunday, December 20, 2009

Felices navidades!

A toda la gente que me lee, mis respetables lectores y mis adoradas lectoras, les expreso mi felicitación por Navidad y por el año nuevo.
Voy a enviar dos postales navideñas, estilo Lucky.
MERRY XMAS!!

Bastante apropiado en esta época de apagones y demás...


...espero que no lo pasen tan patético como Kuroi-sensei...

Monday, December 07, 2009

Hágase tu voluntad.



En este árido desierto de acero y piedra,
elevo mi voz para que puedas oírla,
Al Este y al Oeste hago una seña.
Al Norte y al Sur muestro un signo que proclama:
¡Muerte a los débiles, salud para los fuertes!
Libro de Satán.

- Buenos días hermano, Dios le bendiga. Permítame hablarle de las buenas nuevas de Cristo y... Buenos días hermana, Dios le bendiga, deseo platicar con usted acerca del mensaje que tiene Cristo para nosotros y (.....) le esperamos mañana en el templo, que Dios le bendiga. ¡Buenas tardes, hermano mío...!

Magdalena pasaba su día repartiendo revistas de su congregación religiosa, sea ubicada en las esquinas programadas estratégicamente por su pastor y superior, sea viajando de norte a sur en los buses. Siempre vestida de acuerdo a las rígidas reglas de su religión, impuestas por su familia desde niña. Una larga falda que nunca suba de los tobillos, tamaña obscenidad sería, blusa a mangas largas y suéter para tapar los orígenes del pecado. Nada de maquillaje, el maquillaje lo usa la ramera de Babilonia y sus inquinas hijas para atraer a los demonios e incitar a orgías diabólicas. El rostro fresco y sonrosado, y una gran sonrisa que no le negaba a nadie.

Algunas veces le sorprendía la falta de fe de muchas personas, personas que rechazaban su mensaje de forma cordial y educada, y otras cortante y grosera. Pero rechazaban el mensaje de Cristo. ¡Tiempos de Lucifer, señales del acabóse final!, gritaba el pastor cada domingo, día del Señor y de descanso obligatorio. Pero ella, soldado de la Iglesia, no iba a cejar en su empeño, en su deber enviado del Altísimo. Daría toda la fuerza y ganas que tenía para convertir a todas las almas posibles, para salvarlas del eterno lago de fuego y azufre, donde no sería más que el llanto y el crujir de dientes. Las llevaría al seno de nuestro Señor, para que por toda la eternidad disfrutasen del nuevo Edén prometido. Era su misión en vida.

- Querida Magdita - Le aconsejaba continuamente su pastor colocando ambas manos en sus hombros - Bajo tu persona Jesús está pescando nuevos peces, atrayendo nuevos corderos y a tranquilas aguas los llevará, a frescos pastos los llevará. Entiende que ésta es tu responsabilidad, hermana querida. Y que la pureza de tu corazón - añadía posando su mano santa sobre el generoso seno izquierdo de la joven - sea la salvación de tantos pecadores y paganos. Vé por ellos, querida de Cristo - la despedía, con una cariñosa palmada en el trasero.
Magdalena, feliz de su tarea impuesta.

Así se hallaba recibiendo otra respuesta negativa cuando notó en su espalda una mirada. Volteó y divisó sentado en la parada de bus un hombre. Como de unos treinta y cinco, vestido con traje negro y camisa blanca. El rostro cuadrado, sin afeitar algunos días. Ningún peinado ordenaba esa mata de cabellos oscuros; y la boca semiabierta en una torva sonrisa. Y sus ojos. Ojos que no le parecieron humanos. Casi animalescos. Clavados en su persona. El pinchazo helado de su estómago no borró la sonrisa del rostro de ella.

- Parece que el pecado corre por su alma entera. Si lograse salvarlo... me ganaría el cielo. - Pensó para sí.
Avanzó hacia el hombre que seguía sin desviar su mirada de Magdalena, y empezó su habitual letanía. Buenos días, hermano en Cristo, Dios le...
- Tienes unas tetas para chuparlas todo el día, preciosa.
Magdalena crispó su garganta, cortando de golpe su discurso. Nunca, en toda su vida, había recibido semejante respuesta, ni tan grosera. Con los ojos desorbitados y forzando su sonrisa al máximo, intentó continuar su introducción. Ejem, le decía, señor, que Cristo le ama y las nuevas buenas, digo, buenas nuevas para usted...
- Y esas nalgas tuyas, desde que caí por aquí no he dejado de desear entrarles a mordidas. Estás más rica que el pan caliente, mi cielo.
Sintiendo que toda la sangre de su cuerpo se arremolinaba en sus mejillas y el resto de piel de su cara, la chica apenas logró balbucear un Dios le bendiga y salir a un paso más que apretado, mientras lanzaba una última mirada al tipo, quien no dejaba de mirarla mientras se pasaba la lengua por los labios.

- Fue terrible, hermana Asunción, ¡terrible! Ese tipo me interrumpió dos veces sólo para insinuarme obscenidades... - sollozaba Magdalena abrazada con la hermana que supervisaba directamente el trabajo de la chica. La cuarentona señora, moviendo la cabeza de indignación replicó:
- Fue un poseído del diablo, hermanita, sólo eso. Es una pobre alma gobernado por los poderes malignos y que los mismitos demonios hablaban por su boca. Tú, tan inocente y tierna, no pudiste más que aterrorizarte ante las diatribas de esta bestia... tranquila hermanita. Hablaré con el pastor para que te coloque en una zona diferente.
Magdalena le agradeció, pero sin quedar totalmente convencida. Más tarde, visitó al pastor, quien con voz cariñosa le explicó:
- Magdita querida, lo que has sufrido es un golpe duro, al enfrentar a ese ser salido de los infiernos. Pero aquí yo te digo hija mía... considera a ese tipo un desafío que Cristo te puso en el camino, un severo obstáculo a salvar para que tu fe se solidifique aún más, autentificando superiormente tu camino hacia la santidad- recitaba el pastor mientras abrazaba estrechamente a la emocionada joven, mientras una de sus manos reposaba blandamente en su trasero. - Entonces vé con Cristo que todo lo puede, hija. No sucumbas ante este ser digno de lástima, y así como nuestro salvador expulsó una legión de demonios del loco errante, así tu también podrás borrar al ente que habita el alma corrupta del que te molestó. Ve ahora! - Terminó dándole la familiar palmada en el trasero a la chica.

Todo rastro de miedo y asco había desaparecido en ella. La decisión renovada de hacer hasta lo imposible para salvar esa alma atormentada por el pecado y las fuerzas infernales, la llevaron a buscar febrilmente al susodicho. Probó varias veces a buscarlo en la parada de buses donde lo conoció pero nada. Finalmente, al empezar a caminar para buscar otra zona de pesquisa, oyó una voz familiar a sus espaldas.
- No me dirás que me has estado buscando, preciosa...
Volteó y lo reconoció. El mismo tipo mangajo de la otra vez. Vistiendo el mismo traje. Y la misma mirada repleta de morbo. Encomendándose, Magdalena encaró al hombre.
- Dios lo bendiga - dijo, casi como un regaño. - Veo que usted es una persona totalmente repleta de pecado y que el diablo ha tomado posesión...
- Primero que nada, preciosa, no me eches bendiciones como piedras. Me parecen insultantes, en verdad. - la volvió a interrumpir. Ella continuó.
- Las bendiciones son bendiciones. Y nunca hacen daño. He venido a decirle que sus palabras no me han afectado en nada, pues Cristo me protege con su...
- ¿Que no te he afectado en nada? ¡¡Ja, ja, ja,ja!! Si pude ver clarito cómo te ponías como un tomate cuando te solté esas dos frases, linda! ...y supongo que también te ha de haber afectado allá abajo también, ¿no? ¿Alguna vez alguien se te ha insinuado asi, linda? ¿Te ha hecho ver qué cuerpo espectacular tienes? ¿Ese pedazo de...?
- ¡Le pido, en el nombre de Dios, que por favor modere su lengua, señor! - interrumpió ella ahora, muy irritada. - ¡He venido ante usted para mostrarle el camino de la vida eterna! ¡El camino por el cual su alma será salva!
- ¿Un camino repleto de beatos, abstemios y asexuados? No gracias, linda, yo tengo mi propio camino. - volvió a reír el hombre, sin dejar de clavarle los ojos. La chica sentía inflar su indignación como nunca antes alguien le había provocado. Pero no iba a perder el control. Tenía una misión por delante.
- El camino que ud. toma, es el ancho al infierno. Yo le ofrezco el estrecho al paraiso. - Replicó, muy segura de lo que decía.
- Un camino creado para que los incautos entreguen todas sus posesiones terrenales al partorcito, verdad? Mira preciosa, necesitas enterarte de algunas cosas.
- ¡Miente! Nuestra senda es para los puros de corazón y de alma, y tratamos que todos se unan a él! - chilló la chica con ira.
- O sea que si yo soy puro de alma y corazón pero no estoy en SU senda, me iré directo al infierno? ¿Eso es lo que me quieres decir, preciosa? ¿Que ustedes, su secta, tienen banda ancha y conexión VIP al cielo? ¿Eres capaz de tragarte semejante mierda?
- Dios es uno solo, pero hay muchos que sólo adoran imágenes falsas y por eso...
- Preciosa, tu secta fue creada en Estados Unidos por un par de avivatos que sólo para obtener dinero a costa de los ingenuos como tú, crearon su propia versión de Dios y ahora tú sirves a estos financieros religiosos, chiquita. Pero en fin, dejémonos de charla tonta - El hombre se incorporó y tomó a la chica por la cintura, la cual quedó estupefacta, sólo interponiendo su biblia entre los dos pechos.
- Desde que te vi por vez primera, te he deseado con ardor, preciosa. Me muero por hundir mis labios en tu cuello, en tus senos, juguetear con mi lengua en tu ombligo e ir bajando, bajando hasta cebarme por completo...
Magdalena no le dejó terminar. Apartándose con un empujón, echó a correr, con el rostro repleto de lágrimas. Fracasó y miserablemente. El tipo o era hombre o demonio, pero nunca había encontrado semejante adversario. Con un no, gracias habría bastado, pero todas esas frases tan horribles, tan blasfemas. Fue directo a su cuarto y lloró largo rato.

Entre sus hipos de llanto, iba recordando con asco una a una las frases del tipo. Hasta que recordó las últimas que dijo. Te he deseado con ardor. Muero por hundir mis labios en tus senos, en tu ombligo e ir bajando. Las asoció luego con las frases primeras, al conocerlo. Todas ellas se fueron repitiendo una y otra vez. Su llanto había desparecido pero su respiración seguía siendo agitada, aunque ya no por el cansancio. Sintió nuevamente esa sensación de tener toda la sangre de su cuerpo en la piel de su rostro. Advirtió entonces que su mano estaba plantada en su pubis. Acariciándose. Saltó de la cama horrorizada. Mientras el agua fría caía por su cuerpo, la chica pidió perdón al cielo de rodillas por haber estado a punto de sucumbir ante las tentaciones de Satanás y la lujuria.
En los días que siguieron, decidió darse unos días libres para poner su cabeza en orden. Mientras revisaba los libros teológicos de su padre, encontró un libro de demonología. En éste hablaba de los íncubos, trasgos sexuales masculinos, de Asmodeo, señor de la lujuria y de Cerunnos, amo de las brujas y de la sexualidad malsana. Ahora que tenía identificado al enemigo, volvió a decidir atacar al blasfemo.
Mientras pensaba en su estrategia, se dirigió a un mirador. Mientras veía la ciudad a sus pies, juntó sus manos para empezar a rezar. Pero en el momento de hacerlo, sintió que otro par de manos separaban las suyas y la volteaban rápidamente. Era él, su objetivo y enemigo. Que la tenía estrechamente abrazada.
- ¿Sabes qué, preciosa? La humanidad es como una enorme masa de agua, como un mar. Como un pantano. Enorme, movedizo, sucio, fastidioso. Pero es esa misma agua que forma las gotas de rocío en los pétalos de las flores, formando espectáculos grandiosos. Y tú eres una de esas gotas de rocío. Pura, hermosa, delicada, deseable...
- ¡Quíteme las manos de encima o llamaré a la policía!
- ¿Con qué teléfono, con qué bocina, con qué oración, ah? Estamos en un mirador muy apartado, y es muy difícil que te oigan por aquí, preciosa. - Susurró el hombre, con los ojos completamente fijos en ella, y a veces desviándose a detalles de su cuerpo. Magdalena, con la indeseable sensación del sonrojo, apartó la cara.
- Usted... usted está poseído. El demonio tiene control total de sus actos. Pero aquí estoy yo para desaparecer a estos enviados del averno. - Desenfundó una cruz y la apuntó al rostro del hombre. Este desorbitó los ojos. Con voz grave y vibrante, ella lanzó una rápida letanía.

- ¡Atrás Cerunnos, atrás Asmodeo, atrás incubos! Vosotros que poseéis a este hombre, abandonad su cuerpo en el nombre de Dios Todopoderoso y su hijo Jesucristo! Vade retro, Satan! Yo te expulso de este hombre, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo! Aleluyaa!!
Sonrió victoriosa al ver al tipo cubrirse el rostro con las manos y chillar destempladamente. Lo logré, pensó alegremente mientras se aproximaba al tipo y...
- ¡¡BUUUU!! - Gritó el hombre mientras se destapaba el rostro y se lanzaba casi a pegarse contra Magdalena. Esta soltó un alarido y cayó sobre la hierba. El tipo se reía a carcajadas.
- ¿Crees que esa bobada podría ejercer algún efecto en mí, preciosa? ¿Cerunnos, Asmodeos, demonios ellos? Son dioses con los nombres arrancados por esta religión del camino derecho, convertidos en figuras de abominación para propia conveniencia de los cabecillas de los tragahostias. ¿Cómo puedes acaso exorcisarme de antiguas divinidades que sólo eran veneradas por actos tan naturales? ¿Tan estúpida te vuelve esta fe? - Decía sin dejar de reírse. Y sumido en sus carcajadas, no pudo esquivar la violenta bofetada que le lanzó Magdalena. Al regresar la mirada, vio su rostro bañado en lágrimas y transido de rabia.
-¡¿Quién te ha dado el derecho a burlarte de mi fe?! ¡¿Por qué siempre pasas ofendiendo mis principios?! - rugía la muchacha entre sollozos - ¡¡Tü siempre pasas regodéandote en el pecado, y lo peor de todo, quieres incitar a personas a meterse en él, a personas temerosas de Dios como yo!!


- ¿Pecado? Es pecado acaso algo tan natural como el deseo sexual? Es pecado ansiar el alimento? Es pecado ansiar cosas materiales para vivir mejor? Santifica acaso el padecer necesidades o dolor físico, preciosa? - decía el hombre mientras se acercaba a la llorosa chica - ¿No te estás dando cuenta que el único pecado que estás cometiendo es esa maldita sensación de culpa cada vez que sientes esos deseos? ¿Sensación de culpa impuesta por estas mal llamadas autoridades religiosas?
- Pero la biblia dice muy claro que los hombres deberán seguir las leyes divinas, puesto que el hombre fue hecho a imagen y semejanza de Dios...- susurraba temblorosa la chica, sin poder controlar su evidente sonrojo.
- ¿Y no has leído acaso el Cantar de Cantares? "Mujer, en tus pechos mana leche y miel", "Entre mis piernas guardo mi tesoro, cual gacela salvaje, sólo para ti, mi amado". ¿No es eso un canto a la felicidad del goce sexual? Y lo que es más importante, el hombre no está hecho a imagen de Dios.
ES EL PROPIO DIOS QUIEN ESTÁ HECHO A IMAGEN DEL HOMBRE. - Dijo ya susurrando a sólo milímetros de los temblorosos labios de Magdalena, quien sólo sentía torbellinos en su cabeza que mezclaban cánticos religiosos, prohibiciones y severas advertencias, con las contundentes y sensuales palabras emanadas por este hombre, este demonio, lo que sea, pero que estaba haciendo hervir su sangre y despojándola de miedos y prejuicios. Intentó débilmente su último contraataque.

- Eso.. que dices... es herejía... es.. blasfemia...
- Blasfemia y de la imperdonable sería dejar pasar a alguien como tú - dijo quedamente el hombre al posar su boca sobre la de Magdalena. Ella sólo pudo respirar violentamente y crispar sus puños al notar la boca salvaje recorrer cada espacio de su boca mientras los brazos no dejaban de acariciarle la espalda. Ni siquera notó el vestido resbalando por su piel estremecida liberando sus senos, que fueron lamidos luego de ser su cuello completamente besado. Cualquier protesta o resistencia estaba cortada de cuajo por esas manos y esas fauces. Sus rodillas cedieron y se encontró desnuda sobre su vestido, sometida a las caricias y lamidas de su hombre blasfemo, quien sólo se detuvo en su faena para decirle:
- Tal como supuse la vez pasada... tienes una tetas para chuparlas todo el día. Y eso que me falta de catar más abajo...
Echó acción a las palabras, dando caza a la gacela salvaje, el tesoro guardado, y se cebó en ella. Lo hizo hasta que la joven lanzó un agudo gemido, señal que ya había logrado ingresar por un ratito en el paraíso.

Cuando la chica pudo ordenar sus pensamientos, se vio desnuda y ansiosa. Jadeando le preguntó porqué no terminaba ya lo que tenía que hacer.
- Esto considéralo el principio, preciosa. De cualquier manera, ya eres mía... dijo el hombre con una brutal sonrisa de oreja a oreja. El fervor religioso volvió a burbujear dentro de Magdalena, quien se vistió rápidamente y salió a toda carrera aterrorizada.
Ni siquiera podía pensar con claridad, salvo que sabía que sus pasos la dirigían directo a casa del pastor. Abrió la puerta violentamente haciendo saltar de su silla al buen pastor, quien se apresuró a cerrar una laptop.

- ¡Magdita, hija mía! ¿Qué te trae por aquí, querida mía? Ven y siéntate, que te veo agitada...- dijo el señor mientras ofrecía una silla a la chica. Esta al sentarse, ocultó su rostro entre sus manos y habló casi escupiendo las palabras.
- Pastor, perdóneme, he fracasado, y miserablemente. No he podido convertir al alma maligna que me puso como desafío...
- Explicate mejor hija, ¿cómo que has fracasado? Esa oveja descarriada rehusó volver al rebaño del Señor? Ha desafiado los dictámenes sagrados de nuestro Señor? Eso es lo que ha pasado, hija mía?
- Exactamente como usted dice, pero algo peor ha ocurrido... ¡me acuso a mí misma de haber cedido en la tentación del pecado carnal! ¡De haber cedido a la diabólica tentación!
El sacerdote tragó saliva mientras inquirió más información de Magdalena. Esta sin retirar el rostro de sus manos, contó cada detalle de los hechos. Todos y cada uno. Hasta que sólo fue el silencio absoluto. Confusa, la joven alzó la vista y vio aterrada el rictus del pastor.
- Hija, has pecado. Has roto la confianza de Jesús sobre ti. Y es mi deber y obligación reformarte. Debo arrancarte todas esas tentaciones e ideas satánicas que pululan en tu carne. ¡Levanta tu vestido!
- ¿Q...qué está diciendo, pastor? ¿Para qué desea que me desnude? - Preguntó cada vez más confundida la muchacha ante la mirada vidriosa del pastor.
- ¡Que te levantes el vestido, he dicho! ¡Usaré el poder de nuestro Señor para expiar todos y cada uno de las manchas de tu piel y carne, tú, receptora de pecado! ¡Tengo en mi poder la herramienta indicada que expulsará la escencia del diablo en ti! Ahora ven, Magdalena, que voy a santificarte en este momento!! - chilló el pastor mientras intentaba acostar a la fuerza a la muchacha sobre su escritorio y de abrirle las piernas.
Magdalena no podía creerlo. Lo mismo que había estado deseando hace poco rato, ahora lo aborrecía supremamente, al ver al pastor pelear contra sus piernas e intentar bajarse los pantalones. Horror y furia. Horror y furia. Los dogmas se fragmentaban, las ideas impuestas se desmoronaban, mientras el cirio sagrado del pastor avanzaba hacia su piel, La mano antes bendita, ahora maldita, apretujando su seno derecho y la otra, mantenía abierta su entrepierna, dispuesta a realizar el supremo exorcismo. Magdalena rogaba a Dios por un milagro que nunca llegaba. ¡Que alguien venga en su ayuda! Cristo, la Virgen, el Espíritu Santo, la santa Cruz, quien sea!

¡Santa Cruz! ¡Santa Cruz metálica en el despacho! ¡Aférrala y golpea!
¡La sangre de Cristo tiene poder, tiene poder!
¡Un talento, cinco talentos, diez talentos!
¡Donde tres veces veinte, cinco veces setenta!
¡El vino en sangre! ¡La sangre que mancha e despurifica!
¡APOCALIPSIS!
Se detuvo. Vio la papilla roja que antes fue la cabeza del pastor. Las salpicaduras. La cruz deforme y el Cristo llorando lágrimas rojas.
No. No fue pecado. No pecó. Fue ojo por ojo. Diente por diente. Ofensa por ofensa. ¡SANGRE POR SANGRE!!

Aplausos.
Aplausos que provenían del portón. Y ahí, reclinado en el marco, su demonio, qué decía, su hombre. Sonriendo de oreja a oreja. Con ojos de animal salvaje.
- Preciosa mía. Por fin empiezas a entender. Ahora, déjalo todo atrás y sígueme.
- Voy contigo, mi señor.

Thursday, November 19, 2009

En Otaku-mode: Mujeres arrechas del anime.

Desde la primera vez que hice los post otaku-mode, me han sugerido más de una vez que vaya elaborando una lista de mujeres o chicas destacadas del anime en general. Sea por su belleza física, espiritual, ambas, por su personalidad, por sus aventuras o por lo que sea, me permito lanzar este pequeño listado de féminas, sin orden general, porque todas merecen estar. Y si me olvido de alguna u otra, pues ahí acotan.

KONATA IZUMI (LUCKY STAR):

Konata no es precisamente el prototipo de la protagonista de un anime. Es patuchísima (142 cm), con un cuerpo de pena (más magra que un yogurt desgrasado) de labio leporino (^w^), una virtuosa en pasar materias raspando (sólo estudia la noche entera antes de un examen y vive gorroneando deberes) y una otaku declarada.
Pues bien, ésta y otras características otorgan a Kona-chan su enorme carisma. Más viciosa que yo, puede pasarse sin pena dos días seguidos jugando en su PS2 o en su RPG on line, así tenga que pagar chuchaqui seco luego. Tiene una colección gigantesca de manga y doujinshi (versiones semi-legales) como para apenar a más de uno. Además es bastante notable en atletismo (sólo que no practica en serio para no perderse sus animes favoritos) y demuestra gran inteligencia y pensamiento estratégico en lo que le gusta (aunque no lo hace en cosas verdaderamente importantes). Es muy apegada a sus amigas (sobre todo con Kagami) así se estén pinchando mutuamente con comentaritos venenosos. De ella saldrán la mayoría de referencias a diversos manga y anime editados. Está consciente de su falta de curvas y estatura, pero ese hecho le resbala, es más, disfruta de su estado diciendo que "las tetitas diminutas también tienen su público". Casi nunca se cabrea, máximo se pone trompuda con alguna gozada de Kagamin, pero como buena viciosa, que le toquen los datos de sus videojuegos y arde Troya.
Le encanta el chocolate, siendo su almuerzo típico una enorme cornucopia rellena de chocolate que acompaña con un botellín de leche. Para pagarse sus gustos, trabaja en un bar Cosplay (para los que no sepan, Cosplay es disfrazarse de tal o cual personaje de anime o cómic) ejerciendo los papeles que interpreta a la perfección.
(Tomado de mi anterior post)

BELLDANDY (AH MEGAMI-SAMA!:

Diosa de la mitología vikinga que significa "Lo que es". Es una de las Nornas, quienes controlaban la vida y el destino de todo y todos, dioses incluidos, junto a sus hermanas Urd y Skuld. Kosuke Fujishima les da un toque mucho más romántico y humorístico al plasmarlas en su obra maestra Oh my Goddess!
Cuando el bagazo social Keiichi Morisato digita por error un número de teléfono para comprarse una pizza, termina accediendo al sistema Celestial de atención al cliente, y la diosa Belldandy desciende para concederle un deseo. Morisato, creyendo que todo es jodita fideomatch le pide a la hermosísima diosa quedarse con ella para siempre. Con esto comienza una tremenda carga de aventuras y el inicio de un disparejo romance en donde la divinidad hará uso en más de una ocasión sus poderes.
Belldandy aparte de bella, es dulce, inteligente y muy generosa. Siempre prefiere hacer sus tareas a mano limpia que usando magia, dado que para ella lo hecho manualmente es hecho con amor. Su temperamento es muy dócil y sereno, a menos que realmente la molesten (un defecto en ella son sus incontrolables celos) con lo cual ella podría arrasar con el planeta inclusive. Para evitar un holocausto accidental, mantiene sellado la mayoría de su poder con un arete especial.

AYA MIKAGE (AYASHI NO CERES):

Aya es una adolescente como cualquier otra chica. Vive en un barrio mediano de Tokyo con sus padres y su hermano gemelo Aki. Cuando están por cumplir los dieciséis años son convocados por todo el clan Mikage pero se extrañan al ver la solemnidad del acto. El patriarca del clan les hace entrega a los muchachos de una caja, la cual al ser abiera muestra una mano momificada, y al tocarla Aki sufre un montón de heridas corporales lo que provoca el asombro de la familia, pero éste se incrementa proporcionalmente al ver a Aya transformada en una mujer de cabello oscuro y rostro lleno de odio, quien se identifica a sí misma como la doncella celestial Ceres y empieza a reclamar a los gritos su "hagoromo" o manto sagrado. Tras volver a la normalidad, Aya se queda horrorizada al ver a su hermano tan malherido y para remate descubre que toda su familia está intentando matarla. En plena huida, es rescatada por un clan familiar rival y la toma bajo su protección. Aya deberá afrontar no sólo la continua lucha para que su alter ego Ceres, la domine por completo, sino también los intentos de los Mikage para asesinarla y el dolor de ver convertido a su amado hermano en su peor enemigo. Es de admirar el temple de la chica, quien pone esfuerzos sobrehumanos en intentar llevar una vida normal al tiempo que averigua más y más sobre la identidad de Ceres y su relación con el hagoromo. Eso sin contar con un amor que parece más destinado a terminar en tragedia.

HANAE ICHINOSE (MAISSON IKKOKU):

Si la capacidad de chismear y entrometerse en la vida de otros fuera un sentido estilo Saint Seiya, el trompallanta Barahona y la virgen de orejas Marián serían caballeros de bronce comparados con esta suprema dorada del chismorreo, la altisonancia, la husmeadera y la hinchadera de bolsa. La doña Ichinose es la vecina del apartamento 1 del condominio Ikkoku-kan, regentado por la hermosa pero irascible viudita Kyoko Otonashi, la cual cada paso que da es besado por nuestro típico fracasado de suerte bizarra Yusaku Godai. La cosa podría marchar suavemente de no ser por la tarea de vecinos que pasan tres cuartos de su vida activa metiendo la cuchara, provocando malentendidos, discusiones, cagada y media y demás lindezas típicas de los chismosos, liderados por nuestra rolliza sra. Hanae.
Hanae tampoco es un ejemplo de mujer anime. Con cuarenta y tantos años encima y otras tantas libras de exceso, siendo aparte tamaño compacto, la doña es menos simpatica que el Cholo Delgado en la entrega de los Pulitzer. Encargada de la crianza de su retoño Kentaro, cuando anda sola pasa el rato socavando intimidades y detalles de la vida de los otros para luego regarla eficazmente a los otros habitantes de la casona. Y cuando no está chismeando, está entrándole al chupi de tal manera que Garganta de Lata saldría avergonzado. Es marca registrada su bailecito de borracha con los dos abanicos japoneses. Su marido, apenas aparecido en el manga, es otro salado con porvenir más negro que ojeras de EMO puto.

REVY (BLACK LAGOON):

La versión más literal de "mujer de armas tomar". Nuestra señorita siempre dispara primero y pregunta luego. Pertenece al grupo de mercenarios de Black Lagoon, quienes están dispuestos a cumplir casi cualquier misión por un fajo de billetes. Y asimismo, es otra chupadora de cuidado. Cuando desenfunda sus 45, mejor será que no se cruzen en su camino, o les rellenará de plomo el pecho.

AMI MIZUNO (SAILOR MOON):

Mi favorita de las Sailor Scouts, debido a su gran inteligencia y su enorme ternura. No sólo su ataque es vital para confundir al enemigo (aunque luego lanza ataques más poderosos basados en agua) sino que ella es la encargada de hacer los planes para las batallas por venir. Tiene planeado estudiar medicina tan pronto se gradúe de colegio y adora sobre todo las hamburguesas.

SHAMPOO (RANMA 1/2):

Esta adorable chinita de cabello violeta no hay que tomarla a la ligera. Es la campeona de una tribu de amazonas entrenadas para combatir de cualquier forma posible, aunque el arma predilecta de Shampoo son dos mazas esféricas con las que aplasta a cualquier oponente. Al haber sido vencida por Ran-chan (Ranma forma femenina), le estampa a su contrincante en el cachete "el beso de la muerte", lo que significa que por ley y honor, deberá perseguirla hasta el fin del mundo para matarla y así lavar su honra. Poco le dura la venganza al ser derrotada de nuevo por Ranma varón, pero con un resultado totalmente contrario. La amazona queda perdidamente enamorada del dos en uno, así que ahora buscará deshacerse de sus rivales de amor como sea, comenzando por Akane. Luego de caer a la fuente del Gato, cualquier contacto con agua fría la transforma en una gatita blanca. Para su mala suerte, Ranma padece de alurofobia (terror a los gatos). Su pretendiente formal, el cegatón Mousse, es el blanco de los corajes de ella, quien usualmente acaba trapeando el piso con su humanidad.

TSURUKO AOYAMA (LOVE HINA):

La hermana mayor de la belicosa Motoko, presenta una diferencia en destreza tal que es como comparar un pichirilo con un lamborghini. En apariencia una delicada ama de casa, se vuelve el apocalipsis con hakama cada vez que descubre alguna mentira de su hermana, convirtiéndose en un azote invencible.

HARUHI SUZUMIYA (SUZUMIYA HARUHI NO YUUTSU):


Mucho se ha hablado de esta exigente y muy acuerpada señorita, quien desprecia todo lo relacionado a lo humano, buscando más bien todo lo que tenga que ver con lo sobrenatural. Lo que ella no se da cuenta es que casi todos sus compañeros del grupo S.O.S. fundado por ella presentan precisamente esas características. De cualquier modo, Haruhi es una líder indiscutible y mediante todo tipo de tretas y triquiñuelas logrará poner la balanza a su favor.

CHIHIRO FUSHIMI (PERSONA 3):

Más por razones personales la pongo aquí (porque es la imagen anime de la neo-geek) porque Chihiro es tímida, asustadiza y androfóbica. Sólo cuando el protagonista la conoce se empieza a conocer su historia y se logra que ella sobrepase sus propios miedos. La volvemos a encontrar en un pequeño cameo en Persona 4, donde ella es la flamante presidenta del consejo estudiantil, aunque la propia Mitsuru le tuvo que escribir su discurso. Hermosa, eso sí.

SAMUS ARAN (METROID SAGA):

A la mierda la idea cojuda que Lara Croft fue la primera heroína de los videojuegos. Diez años atrás, la cazarrecompensas Samus Aran ya se mataba a tiros de plasma entre los organismos vampíricos Metroid, hasta llegar al aposento de la pirata espacial Mother Brain y practicarle una lobotomía a punta de misilazos. Su traje ha sufrido muchas variaciones, pero afortunadamente no su cuerpazo (sólo visible tras doblar el juego en cierto límite de tiempo).

AERITH GARANSBOROUGH (FINAL FANTASY VII):

Esta humilde floretera que se gana su sustento diario entre las sucias calles de Midgard encierra un secreto muy especial. Es la última de la raza de los Cetra, entes humanoides con la capacidad de hacer grandes hechizos mágicos. Y justamente en la hebilla de su cabello se encuentra la Materia con el hechizo de magia blanca más poderoso: Holy. Por desgracia, sus propias capacidades marcan su fatalidad al ser cobardemente asesinada por Sephiroth antes de lograr invocarlo. Es uno de los personajes de videojuegos más queribles, por su dulzura y su inocencia. Y por esas mismas características arde tanto presenciar su fallecimiento y posterior entierro.

SAYAKA YUMI (MAZINGER Z):

Antes de que el pandillero Koji Kabuto piloteara por vez primera al castillo de metal Mazinger Z, esta valiente jovencita ya era una experta pilotando el prototipo de robot de super aleación Afrodita-A. Tras convertirse en tutora de Kabuto, peleará junto a él sinnúmero de veces contra los monstruos mecánicos del Dr. Hell, sin rendirse nunca, así sea la primera en caer en combate y así Afrodita sea despedazada y destruida. Posteriormente pilotará a Diana A mientras va avanzando la relación de amor con el patanzuelo de Koji (le ha tenido que soportar la de mangajadas y bromas pesadas a lo largo de la serie).
No es hasta Mazinkaiser donde se realiza algo que sus fanáticos han esperado por eras ver. Los grandes, bamboleantes y redondos senos de Sayaka al desnudo.

MOTOKO KUSANAGI (THE GHOST IN THE SHELL):

Tener un cuerpo cibernético de titanio no es problema para la detective de la novena división, Motoko Kusanagi. Ella se dedica a buscar criminales reales y virtuales, hasta que finalmente termina fundiendo su "alma" con la del puppet master convirtiéndose en un ente vivo dentro de la internet.

BAYONETTA (BAYONETTA):

Aún no sale oficialmente este juego y me muero por jugarlo. Dante, Kratos, muevan su masculino trasero a un lado, que llegó mamita pega duro.

LENNETH (VALKYRIE PROFILE):

Despertó de un sueño de siglos por el padre Odín para reunir guerreros para el inminente Ragnarok. Así que Lenneth deberá aguardar a que ocurran decesos de guerreros dignos para engrosar las filas del Valhalla y los Aesir, para enfrentarlos en el día final contra los Vanir liderados por Loki. Pudo haber vivido una vida normal entre los mortales, pero el dictamen divino la arrancaron de sus lazos terrenales volviéndola la guerrero siega almas del excelentísimo videojuego Valkyrie Profile.

ALITA (BATTLE ANGEL ALITA):

Un día, hurgando entre los desperdicios que día con día lanza la ciudad flotante Typhares sobre el infiernillo cyborg Scrapyard, el científico y cazarrecompensas Ido Daisuke descubre el torso de una cyborg con un rostro tan bello que cautiva al tipo y le prepara un cuerpo nuevo. Tras darse cuenta de que domina a la perfección el arte marcial Panzer Kunst, Alita se embarca en una larguísima odisea llena de aventuras, desventuras, batallas mortales, romances (dos válidos en verdad) y autodescubrimiento. Finalmente, en la última etapa de su aventura, Alita sacrifica su vida en beneficio tanto de Typhares como de Scrapyard. Uno de los mejores mangas que he podido leer.

LUCY (ELFEN LIED):

Lucy pertenece a la raza de los Dycocefalus, entidades casi iguales a los humanos, salvando dos pequeños cuernos en la cabeza. Con la apariencia de una dulce muchacha, cuando aflora la personalidad auténtica de Lucy, surge una despiadada y sanguinaria asesina, quien usa sus "vectores", los cuales son como brazos invisibles que puede mover tan rápido como la luz; de forma implacable y eficiente. Mata tanto para protegerse como por placer, aduciendo que los humanos son de por sí una raza inferior. Sólo un muchacho logró comprenderla y aceptarla como era, y por desgracia tal evento cubrirá de miseria la vida del chico.

LINA INVERSE (SLAYERS):

Lina la "matadragones" es la hechicera más famosa de su mundo. Sólo superada por su hermana (de quien la sola mención la hace soltar el churrete), Lina vaga por el mundo acompañada de su guardaespaldas y machucho Gourry (quien tiene tantas neuronas como sentido común, es decir, casi NADA) usualmente precediéndola su fama. En su haber están hechizos de la magnitud del Drag Slave, Giga Slave y el poder invocar al señor de las Pesadillas. Su gran complejo es no poder lucir una pechonalidad adecuada y siempre buscará un método para mejorar su pecho de chifle cervecero.

LISA HAYES (MACROSS):

Aparte de su pericia y su sangre fría al ser puesta al frente de montones de batallas contra los Zentraedi, esta hermosa y veterana milica se da la lija de quitarle el novio a la cantante Ling Min May y de casarse con él.

CJASKA (BERSERK):

Fue rescatada de una violación segura por un cachorro de la nobleza por el que sería su mentor y líder, Griffith, por lo cual le juró lealtad eterna. Desarrolló tal destreza con el florete que tuvo que hacerse pasar por hombre cortándose el pelo para que sus compañeros no se burlaran de ella. Aunque vivía aparentemente enamorada del pinterísimo Griffith, no es hasta cuando aparece el brutal y solitario Guts cuando le empieza a picar abajo y conoce lo que es el amor verdadero (y carnal). Tras la traición de Griffith y masacre de la Banda del Halcón, ella y su amado Guts logran sobrevivir, pero perdiendo en tal peripecia la cordura. De cualquier modo, Guts hará lo imposible por lograr que su querida recobre la sanidad mental.

EMU HINO (CRYING FREEMAN):

Justo unos días antes de cumplir los treinta, la solitaria pintora Emu se encontraba plasmando un paisaje cuando ve a un joven inexpresivo echarse tres muñecos sin ninguna dificultad, para luego soltar asimismo sin ninguna expresión facial, un torrente de lágrimas. Tan impresionada quedó con la apariencia del tipo, que al ir éste luego para asesinarla a su vez (para eliminar todo testigo), ella le pide antes de morir, que le eche un polvo. Como fue el debut de ambos, Yo Hanamura (Freeman) se enamora profundamente y decide hacerla su esposa. Como señora del líder de la secta de asesinos chinos los 108 dragones, Emu deberá esterilizarse (no se permite la sucesión por sangre) y hacerse experta en el uso de arma. Decide dominar la espada maldita Muramasa, con lo cual logra volverse una espadachina de sumo cuidado. Totalmente devota a su esposo, sin importar que el pana tenga que limpiarles el filtro a más de una para obtener provechos económicos y/o estratégicos.

FUJIKO MINE (LUPIN THE THIRD):

La falta absoluta de escrúpulos hecha mujer. Amante o enemiga del gran ladrón Lupin III, Fujiko siempre suele llevarse la mejor parte del botín. Su relación con el siemprequeso salteador es muy difícil de definir.

MENCIÓN ESPECIAL
MIHO (SIN CITY):


La pequeña y letal Miho. Esta silente japonesa, experta en uso de toda arma blanca, es la protectora de las prostitutas del barrio viejo de Sin City, además de la hitman cuando algo anda chueco. No necesita hablar, sus katanas dan suficiente discurso ya. Quién mejor que ella para darle matarile al aladinesco detective Jackie-boy y su séquito de reguetoneros. Uno de los mejores personajes creados por Frank Miller.

Wednesday, November 04, 2009

A dos centímetros de mi epiglotis




Todo depende de estampar una firma, ignorar ruegos y recomendaciones, y empezar a andar. Ya me harté de tanta mierda. Sé lo que va a ocurrir, sé a dónde se dirige este camino y los miguelitos que me aguardan. Nada de eso importa, nada ya puede mortificarme. Sólo quiero llegar.
Por lo menos las gradas hasta la calle, y el anterior proceso de cubrir mis ridículas desnudeces con ropa de hombre, no me quitó gran parte de mis reservas de fuerza. Igual, no debía confiarme. Cualquier cosa puede pasar. Como ante mí van pasando toda esta diversidad de vehículos. Y un montón de buses pedorros, cagando niebla negra y pegajosa, que tantos citadinos no tienen otro remedio que absorber. Asqueroso. Cubro boca y nariz con mi pañuelo más por asco a esa suspensión de partículas combustionadas, que por otra cosa.

Así empiezo a andar, al ritmo más pausado posible. Tranquilo. Retén dentro de ti esa convulsión brutal que pugna por salir. Te va a robar el poco aire que logras chupar casi de la atmósfera y podrá hacerte colapsar. Y ese lujo no te lo puedes dar. No debes soltar. No debes soltar. Eso, un carraspeo único y el motivo puede ser escupido. Una masa pegajosa, verdeoscura y de sabor acre que elijo cuidadosamente el lugar a pegotearla. Mi respiración se normaliza un poco. Alzo la cabeza y veo un chifa. Pequeño, pintoresco, recatado. Casi con timidez muestra los caracteres garabateados al público para que sepan identificar, amén de un grabado en bambú de ocho personas, santas aparentemente. Como sea, me muero de hambre. No había comido nada desde la noche anterior, habiendo rechazado ese mismo caldo de mierda, esos gusanos en suspensión salobre que querían hacer pasar por sopa de pollo. Ni qué hablar de ese caucho frito, sin un mínimo de condimento, con esas larvas de mosca cocidas. Arroz con pescado? Mis guevas.

Estoy que me muero por saborear algo que me llene la lengua, el paladar, los carrillos. Vamos, que puede ser gato, puede ser rata, los desperdicios del restaurante elegante cercano o los restos que algún comensal dejó con anterioridad en su plato y este chino cochino en su wok negro va a fundir y saltear con un montón de especias y aceite hasta hacerlos irreconocible. Pero lo deseo, prefiero comer mierda con buen sabor, a comer mierda insípida. A ver chino, le digo susurrando al sonriente oriental que aguarda la orden. Esto, señalo un plato con varios saquitos de masa al vapor que según el menú están "relleno de chancho y vegetal", y esto, señalando la "jarra té chino". Es lo que puedo pagar, tras haber entregado casi toda mi plata a estos matasanos de blanco para que sólo me dijeran que era muy poco lo que se podía hacer.

Logro ahogar más tos entretanto llega mi té. Volteo la infusión verdosa en una minúscula tacita y sorbo. Ah, un alivio. La tibieza húmeda hidrata mi garganta, mi tráquea y con eso ablanda un poco todo el cochambre semiseco que vuelve a algo continuo y casi imperceptible en una labor espartana. Voy por la mitad cuando un nuevo carraspeo me deposita en mi boca un nuevo regalito viscoso. Por respeto al chino que me está cocinando expulso en una servilleta el gargajo y lo tiro por una ventana. Maldigan todo lo que quieran, marchantes. Acuérdense de la vagina de mi mamita, a ella ya no le hace falta. Debió hacerse polvo hace tiempo ya.
Por fin las masitas rellenas. Shaomai, creo que decía el menú. Relleno de chancho y vegetal, supuestamente. Por lo menos aún conservo algo de sensibilidad en mis papilas para poder disfrutar de estos paquetitos de sabor y textura. A una la ribeteo de negro salado y a otra de rojo cáustico. Nada de condimentos, peor picantes, me recitaba el doctor, de seguro empeorarán su condición. Vea doctor, vea nomás, me atiborro justo de lo que usted tanto me había prohibido y me encuentro como muchacho en su cumpleaños! ¡Como niño chiquito disfrutando de su leche con miel y avena, tan avena como las de mis pulmones!!

Llega la cuenta con mi último shaomai desapareciendo por mi garganta. Parece que quiere cerrar ya el chino, supongo mientras espero mi vuelto y mi caramelo obligatorio. Desciendo a la calle y una cuchillada me desgarra el vientre. Siento la frente perlada de frío mientras intento controlar las náuseas. Malditas arcadas, déjenme en paz, no me estén jodiendo, que es la primera vez que como algo tan rico en tanto...
Los cuatro dólares con sesenta centavos forman un charco de papilla al lado del poste que usé para reclinarme. Esa plata, esa comida y una buena parte de mis fuerzas. Como si se me saliera el alma. Puta madre.
No tengo más remedio que tomar transporte.

Clavado en mi asiento, veo que montones de cuerpos se aglomeran y aglutinan. No tengo fuerza suficiente para abrir una ventana. Toca aguantar entonces ese hedor bochornoso, aire saturado a grajo, pedo y aliento a cloaca. Y de pronto, filamentos blancos y bailarines se introducen por mi nariz. La memoria da una voltereta. Encendieron un tabaco. Algún idiota encendió un tabaco. Ese maldito, fragante, insano, delicioso, tóxico, adictivo, cancerígeno, sublime, tabaco. Ese perfume asesino, como mujer con la chuchita untada de cianuro, tentador y evocador, me llena la nariz, percute mis mucosas, rastrilla los reflejos de la epiglotis y no puedo ya evitarlo.

Disparo una ráfaga de toses. A donde caiga, a quien le pegue. Toso, toso, toso. Una, dos, tres, cuatro, cinco, pauso y trato de inhalar. Y vuelvo a toser; me agarro el pecho del dolor que me provoca. No las veo pero las siento, miradas llenas de asco, horrorizadas, la compresión de los cuerpos alejándose de mí. Tosa contra su codo, carajo, hay gente decente aquí hijueputa, será la porcina, jesús maría ya nos contagiamos. Magnífico, piensen eso mientras me desgañito a toses, hijos de puta, piensen que entre hoy mismo y mañana pasarán por el mismo tormento que el mío, que les faltará el aire, que pasarán escupiendo pulmones a pedacitos mezclado con verdes espesos, ¡piensen eso, hijos de puta, mientras el bus se detiene en la última estación, ya a sólo unas cuadras de mi casa!

El viento helado se lleva los últimos insultos que recibo mientras voy arrastrando los pies, un paso luego del otro, mientras me aproximo a mi morada. Tengo que llegar. Tengo que llegar. Pero el camino se me alarga, se me estira, y cada quince pasos debo reclinarme para encontrar reservas de energía que aún puedan nutrir mis lánguidas extremidades. Y cada pesquisa es cada vez más infructuosa. Por fin. El portón de mi edificio. Vamos, pendejo, es sangre o tripa. Pon ese pie en el escalón. Usa los brazos, carajo, sube tu fofo cuerpo y termina de colocar el otro pie. Listo. Ya tienes un escalón. De los treinta hasta llegar al siguiente piso. Y mi departamento en el quinto piso. Ciento cincuenta procesos iguales. Ya hiciste uno. Te quedan ciento cuarenta y nueve. Ponle huevos, inútil. Te esperan allá arriba.

Veinte. Es como escalar un árbol.
Treinta y cinco. Es como escalar el palo encebado.
Sesenta. El taita Chimborazo. Al trote.
Ciento veinticinco. Estoy en el Aconcagua, en el K2, en el Everest. Sin oxígeno. Oxígeno. ¡¡Oxígeno, no tos violenta, maldita sea!! Sólo cinco escalones más, cuatro más, tos, tos, tos, tos, tos, tres más y es algo que se rompe dentro de mi pecho, lo noto clarito, y mi última gran inspiración se corta de golpe por una andanada líquida, por una marea espesa y muy salada, que empieza a correr en hilillos por mi boca, que mancha de rojo mi camiseta y borbotea hasta gotear el blanco mármol de la escalera. Sin duda algo erosionado no pudo más y reventó. Dos... uno... mi puerta... no, no te nubles, no te pongas borrosa, no te alejes tanto, alarido agudo y mi nombres varias veces repetido, ya apenas siento mi cabeza rebotando contra las duelas y las manos de alguien que yo solía amar sacudiendo mis hombros sin resultado.

Seis meses de vida a partir de mi diagnóstico. Odio que el matasanos fuera tan condenadamente exacto.

Have you ever been hurt?
Have you ever been abandoned?
Have you ever been truly scared?
Have you ever felt you don't belong here?
Have you ever felt like you don't have a home?
Have you ever felt you don't have a chance?
From the moment of birth, we are already dying
Death is the only true salvation
Through death, man is reborn
Like a butterfly is born out of a caterpillar
And after that, man is finally... free
-Back to madness - Stratovarius

Wednesday, October 14, 2009

El Piropo Eructado


Instalo la rutina. Una orden, arrimar la silla, calzar mi trasero en ella, verter líquido en un vaso opaco y rasmillado, y esperar a que aparezcas.

No me hace gracia la espera. Así que tomaré estos segundos, estos minutos largos como pedo de culebra y los tejeré; formaré una sábana de instantes que abrigarán nuestros cuerpos desnudos, enlenteciendo cada fricción, cada contacto, para volver lo inmediato e impetuoso, en parsimonioso y muy palpable.

Al fin apareciste. Ahí, sentada con ojos vacíos esperando al siguiente que te llene de algo físico, de que satisfaga tus elementales necesidades. Yo tomaré ese vacío de tus ojos, que hasta dentro de tu alma se adentra, lo sé bien, e iré vaciando por esa negrura un montón de palabras hermosas, cada una lanzando chispitas que irán rebotando por esas paredes roñosas y cubiertas de telarañas, para adornarlas igual que un arbolito navideño. Y cuando toda esa hondura sea llenada por esas chispitas, sé que de tus ojos saldrá un brillo tal que podrá opacar hasta las crudas rayas multicolores que cruzan este espacio sin cesar.

Esos rayos que bailan al son del motor incrustado en el techo. Mi mano pelada los atrapará y elaborará para ti artesanías nunca vistas, que ni el magnate ese, que sale por la tele y chilla por ser presidente, podrá comprar. Joyas dignas sólo de ser lucidas en tu piel blanquita, lechada para el piso, piel que por tanto rato he deseado tocar no sólo con mis dedos. Mis dedos que aferran este vaso sucio lleno a la mitad de refrescante amargo helado.

Pues yo cambiaré esta bebida con aspecto de meado y la convertiré en lo más fino que pueda salir de una licorería. Esas botellas pulidas y llenas de nombres tiro sabiñon, shanpan bru, yoni guolker, estoy tan seguro que esos sabores serán dignos de tu paladar. Para que nunca más tengas que aceptar sorbos de vasos babeados, que bebas por placer no por obligación del dueño del local; ni que tengas que aguantar esas manos sudadas en tu cintura, ese olor a chivo que se desprende de tantos de estos malparidos.

No señor, yo iré recogiendo estas pestilencias, las arrancaré de tu nariz dolida, y los volveré perfumes, sean de flores de jardín, de esos frascos y botes carísimos que traen de Europa, de la yoni, de tanto lugar lleno de plata, para que te sientas feliz, la reina que eres. Reina de mi vida y mis días. Mamita.

Haré un trono digno de ti, sacado de esta madera descascarada y florida de astillas que a veces se me clavan, sea en mis manos, sea en mi nalga, que igual ese dolorcito se pasa nomás con verte. Y no sólo un trono haré con todo este palo viejo, haré un castillo, un enorme palacio para que vivas feliz por siempre junto a este Rey que atenderá todos y cada uno de tus caprichos. El castillo lo tendrás limpito el día entero, no te preocupes por los sirvientes, de toda esta caterva de giles voy a hacer tu séquito de criados. Ni uno de ellos se atreverá a posar ni siquiera la mirada en ti, porque uno a uno les sacaré los ojos con mi llave maestra y mágica, la que ajustará todo lo que ande mal, todo desperfecto. Ellos, ciegos y felices de servirte, no dejarán una mota de polvo en todo el palacio.

No como este piso asqueroso, pegoteado de gargajazos, cenizas de tabacos, lodo de botas, biela derramada, que ese trapo puerco del cuidador no termina nunca de sacar. Toda esta mugre, todo este sucio, lo voy a destilar y de él sacaré pájaros cantores, mil y uno, para que te despierten a piares por la mañana, alegren tu almuerzo y te arrullen a la hora de dormir. Los pajaritos te llevarán en sus lomos, sé que no pesas mucho, junto a mí, y en esta alfombra aleteante, cruzaremos el cerro, nos iremos largo, largo, a buscar las ciudades más bonitas, y con las que más te gusten las aplanaré y haré un álbum para que tu gozo al ver el agitarse de sus ciudadanos, cada detalle al milímetro, todas sus luces y sus humos. Y todo esto será de ti. Escucharás el ritmo vivir de toda este montón de manes, muy por encima de ellos.
Yo ahora soy forzado a oir este estruendo de tambores, trompetas y voces cantando a las sábanas mojadas, al vencastígamecontudeseosmas, al pequeño motel donde no exista el reloj, a la gasolina que a no se qué hembra le gusta. Nada de esto es digno de ti, mi reina.

Voy a licuar y a amasar todos estos sonidos vulgares, incluyendo tanta patanada que ha de caer sobre tus orejitas preciosas, como toda tú, y la voy a convertir en poemas, ni ese pana de Neruda podrá sacar algo igual de conmovedor. De este caldo sucio haré que salgan chorros de palabras que se dedicarán sólo a alabar tu hermosura, a decirte cuánto te tengo en mi cabeza, lo señor que me sentiré si decides venirte conmigo. En ese momento seré el emperador sobre todos estos pela...

- Señor, ya lleva siete botellas. Va a pedir otra o quiere cancelar de una vez?

Puta madre, la plata salió justa. Esas moneditas que medio suenan en mi bolsillo las quiero convertir en miles, en millones, para comprar felicidad así sea de sobre, así sea falseta, aunque sea para poder adquirir unos minutos junto a tu lado, que siempre que vengo con lo justo para ti, se me va en este trago maldito. Y ahora te veo sonreír, levantarte y meterte nuevamente en tu cubículo con el rellenador de turno. Saldrás más vacía que antes, lo sé.

Te pido un poquito más de paciencia, mi reina. Sólo eso hasta que finalmente puedas darte cuenta que existo.

Mis pasos van equivocándose sobre la recta hacia mi casa, mis oídos sólo oyen mi canturrear desafinado y mi mirada se eleva y recorre la gigantesca panzota del pez que va lentamente nadando entre las nubes y echando sombra a mis ansias, desvaneciendo mi momentánea alegría.

Saturday, October 03, 2009

Méme a la Tofu IV


¡¡LA PUTA MADRE, OTRO MEME PARA CONTESTAAAAARRR!!!

Este méme me lo robé de Tuchis y su canica dorada. A los tiempos que hacía un meme, así que suelto estas respuestas...

NOMBRE: Tofu-sensei

¿Que prefieres frió o sol?
Mil veces el frío, siempre hay cómo abrigarse...

¿Farra o caída?
Caída, si es estilo DM, mejor.

¿Bar, Disco o Antro?
Antro. Chongo.

¿Para bailar?
Lo ideal, un tango. Pero como no sé bailarlo, con una salsita me conformo.

¿Para cabecear?
Un buen power metal..

¿Para olvidar?
Las geeks que he amado y ellas a mí no.

¿Para intenso calor que tomas?
Lo mejor es agua, bien fresquita. Si no, las bielas infaltables.

¿Disco Infaltable en tu colección asi sea pirata?
Megadeth, y hartos mp3 de videojuegos.

¿Último disco original que compraste?
Resident Evil 5 para PS3. ¿Ah, musica era? Creo que los de Enrique y Ana, en acetato...

Banda Ecuatoriana ícono?
hmmm... no soy tan bueno en eso.

¿Ultimo disco que te bajaste de la web?
Cosmos Rock, Queen.

¿La banda ecuatoriana que no mismo?
Si hablamos de mediocridad y patetismo, nada supera a los Conquistadores y su Conejito.

¿Artista del recuerdo tipo música para planchar que te gusta?
Queen.

¿Lo que mas te harta en el Mundo? Hipocresía, Reguetón, BAchata aventurera, vallenatico hijo de remil p..., TC televisión, el enano Ortiz, los fanáticos religiosos, la gentuza...

¿Concierto inolvidable al que asististe, por bueno?
IRON MAIDEN en Ecuador, la mejor experiencia en el país de Manuelito.

¿Concierto inolvidable al que asististe, por malo?
Me agarraste en curva...

¿Concierto Bizarro al que asististe?
Brujería.

¿Para la depresión?
Elvis Presley, Kenny Rogers, algo de Barry White.

¿Tres cosas que nunca olvidarás de chamo?
Mi nintendo, mi supernintendo y a Mazinger.

¿Tres cosas que nunca olvidarás de guambra? La man que me dio mi primer beso, mi primer polvazo, mi primera borrachera.

¿Cosas que te has llevado de la casa sin permiso?
La verdad, era bastante disciplinado.

¿Para comer?
Todo, sobre todo carne roja CRUDA.

¿Para no comer?
Sólo una cosa. Hígado. YUCK!! Y tampoco me agrada mucho el combo chocolate y coco, ni el KFC o Mcdo.

¿Programas preferidos de radio?
Los de la Metro.

¿Programas de radio que no mismo?
Cualquier cosa que huela a Galaxia o La Otra.

¿Y en la TV NACIONAL?
El único programa realmente bueno de la tv nacional es "Aventureros", un programa infantil diseñado por el INNFA. El peluche Babáu es lo máximo!

¿Y en la TV NAcional que no mismo?
CASI TODO. Comenzando por TODO TC televisión, el enano Ortiz, el pelasables del Abad, la virgen de orejas de Marian y el trompallanta de Barahona, los quemados de Reinoso y cia, y un larguísimo etc.

¿En la web?
Me hice adicto al FB. Blogs amigos, manga en línea, Caballo negro...

¿En la web pornografía o erotismo?
TUBE8.

¿Que odias?
Lo que más me hastía del mundo (ver más arriba)

¿Marca?
Antimarcas.
¿Con Quien te tomarías un café?
Con el Gabo, con Jack Nicholson...

¿Con Quien no te tomarías un café?
Con mi maestro Jorge Velasco, porque con el se toma carajillo.

¿Serie Ochentera de TV? He-man y los amos del Universo. Robotech.

¿Serie Noventera de TV? Dragon ball, Ranma 1/2, los Gatos Samurai.

¿Película Ecuatoriana? Qué tan lejos, Ratas ratones y rateros. Y por mala, chapucera, valedora, TCcera, asquerosa, gentuzera, y por atreverse a lanzar la blasfemia de decir que fue "el mejor largometraje de la historia ecuatoriana"...VERGAZOS DE VIDA. Digo, retazos de vida (o de cómo el pezón de Ericka Vélez intenta justificar un guión de mierda).

Friday, September 25, 2009

Diversos tipos de amor.


Bajo el cielo azul supremo, sin importar toneladas de partículas de carbono lanzadas al aire, sin importar rostros torvos, ceñudos, prejuiciosos, siempre hay un motivo para sentir amor, sin importar de qué tipo.
Se presenta de cualquier forma, de cualquier manera, bajo todo tipo de sabores, olores, vistas y sonidos. Es la forma en que se lo capta lo importante.
No se necesita realizar una gran inversión ni lanzar palabras inútiles para lograr sentir la esencia del sentimiento. Basta una salida, un motivo para verse, unas palabras cruzadas, y se da. La simple imagen de un rostro, anécdotas que sólo a ti se te pueden contar, reírse viendo las expresiones o reacciones, saberse que entre ambos hay algo especial, que no necesita expresarse con besos, caricias, palabras tan comunes y trilladas("te amo, mi amorcito, te adoro mi cielo"), sino más bien con un andar abrazados y que en cada contacto de ojos hables silenciosamente, es suficiente. El amor que sientes por un amig@, sea cual sea.
O que luego camines por una avenida cualquiera y palpes cada sensación, sea nueva o conocida, y que la sientas querida. El aire gélido por tus narices, el cielo nocturno tachonado de estrellas o las luces parpadeantes de la gran ciudad, cada olor y sonido que sale de cada puerta y negocio. El amor hacia cosas materiales.
Y cuando ves a una persona del sexo opuesto, sea las opulentas mamazotas que van trastabillando por tu camino, mostrando 3/4 de teta en su escote, o señoritas de aspecto calmado y responsable, con dos láminas de vidrio protegiendo sus ojos, tan pulcras, calmas, adorables, deseables. No las amas por el físico realmente, sino por lo que provocan en ti. Ternura, deseo, pasión, dulzura. Y claro, tambien es aplicable al sexo opuesto. Que ellas nos vean y se sobrecojan, seamos altos y greñudos y de buenas nalgas; patuchos, regordetes y de rostro severo; flacos, aguados y con cara de niño bueno; enormes, animalescos, trigueños y con ojos de fiera (lobo, tigre, halcón, cualquiera importa). El amor por la apariencia.
Cuántos de nosotr@s no hemos amado absoluta y estoicamente a iconos, seres ideales, dioses y diosas, actores, personajes, prototipos, lo que sea, sabiendo que un ser así nos dará una vida llena de dicha y alegría. El amor platónico.
Todos los que hemos caído irremisiblemente seducidos por las caritas nuevas en nuestra familia, nuestra carne y sangre, pequeños paquetes de travesuras, risas y inocencia, sean hijos o sobrinos. Lo mismo a los que estuvieron por encima o al lado nuestro, y solo con el pasar del tiempo aprendemos su verdadero valor. El amor por el clan.
Amores absolutos, completos, eternos en apariencia, felices, tristes, dolorosos, violentos, que nos dan motivos para vivir, y para morir en ciertos casos. Correspondidos unos, indiferentes otros (pero por lo menos inspiradores) y que entretejen estructuras dentro de nuestros espíritus. Amor hacia otra persona.
Y finalmente, esos amores que sin importar la relación que se tenga, te proveen de tranquilidad, delicadeza, armonía, paz. Esos amores que no necesitan de eufemismos ni pompas. Los que están porque sí. Los que florecen espontáneamente, que tal vez hagan dudar de lo que uno siente, pero que al verl@ uno sabe que es real. Uno sabe que viene de adentro.
Ese tipo de amor, que te llena, te vitaliza, te alimenta.
El mejor tipo de amor, el que con pequeños detalles y pormenores se alimenta y se mantiene fuerte.

Thursday, September 24, 2009

MAAAASHOOOOOOO....

A pedido de mi caserita tan adorada, pongo este par de videos para todos los amantes de los michos.
Yo en lo personal soy sobre todo lobuno, pero hasta uno se queda viendo al minino haciendo de las suyas...



Saturday, September 05, 2009

TRY AN DIFFERENT ANGLE

...Donde todos ven bravura, nobleza y fiereza taurina...

...Algunos vemos un pobre animal torturado, masacrado y muerto de forma sañuda e inmisericorde.


Soy carnívoro y a mucha honra, pero ver semejante atrocidad sólo para divertir a algunos cojudos... Es otra cosa.

...Donde todos ven gallardía, valentía y elegancia suprema, el duelo definitivo entre el hombre y la bestia...

...Algunos vemos un maricón de mierda en lentejuelas aprovechándose de un animal debilitado.

Aaaaayy que riiicooooo me diste donde más me gusta, toritooooh...

¡¡EL TORO, El TORO, RA, RA, RAAAHH!!!

...Donde todos ven glamour, abolengo, nobleza y alta sociedad...

...Algunos vemos un montón de viejas pedorras haciéndose las españolas y una caterva de zoquetes platudos hambrientos de morbo y sangre inocente.



...Donde todos ven alegría, fiesta, festejo, amistad y camaradería...

...Algunos vemos una caterva de cachorros cabeza hueca que se embrutecen a trago y drogas.

...entrarásleff... está chumadasafff...

¡¡¿¿Y vos que chucha me ves, pelaverga??!! (al mejor amigo)

...Donde todos ven una tradición centenaria, una estampa fina y representativa, un motivo para sentir orgullo criollo..

...Algunos vemos una puta blasfemia de mierda, al usar el nombre de Cristo para justificar matanza de animales indefensos, una masacre sin sentido para complacer a cuatro o cinco pelasables y principalmente, un motivo para sentir profunda verguenza ante los ojos del mundo.

Insisto, ¿Porqué CHUCHA seguís haciendo guevadas a mi nombre..? ¡Esto es para vosotras, viejas pedorras que a mi nombre tanta pendejada se mandan!!

TRY AN DIFFERENT ANGLE.
NO A LAS CORRIDAS DE TOROS.



...Y para probar un ángulo diferente...¿por qué no probar algo como esto? O simplemente nuestro buen rodeo montubio. Eso sí es lucha de animal-hombre.

Thursday, July 16, 2009

And I lovED her...




Lady, I WAS your knight in shining armor and I loveD you
You haD made me what I WAS and I WAS yours
My love, there`s so many ways I wantED to say I love you
Let me hold you in my arms forever more

You haD gone and made me such a fool
I WAS so lost in your love
And oh, we belongED together
YOU WON´T believe in my song.
Lady, for so many years I thought I`d never find you
You haD come into my life and made me whole
Forever I´D wake to see you each and every morning
D hear you whisper softly in my ear

In my eyes I SAW no one else but you
There WAS no other love like our love
And yes, oh yes, I always wantED you near me
I HAD waited for you for so long

Lady, your love WAS the only love I needED
And beside me WAS where I want you to be
cause, my love, there`s somethin` I wantED you to know
You WERE the love of my life, you WERE my lady!


...BUT NOT ANYMORE.
Este amor por la Neo-geek, oficialmente, está muerto.
Se aceptan carpetas.

Sunday, July 05, 2009

Lamento Blanco, Risa Negra (Conclusión)

Nota del autor: La verdad tenía planeado sacar una cuarta parte y la quinta para concluir, pero tanto en el taller como los ilustres lectores me han pedido que mejor la haga más corta. Así que si esta parte sale más larga, pues así toca. De todos modos, muchas gracias a todos por haber seguido esta oscura historia, basada en dos buenas amigas mías.



Sin descanso alguno, más que para echar un dormitar breve, había pasado María la última semana encerrada en su casa, intentando encontrar respuestas a la miríada de preguntas que bullían en su cabeza.

Luego de dejar un aviso de que padecía una grave pulmonía contraída aparentemente por haber pasado tanto rato en el sereno hacía algunas noches, y de rechazar amablemente la visita de una enfermera que a la tarde acudió a la mansión para examinarla, María se metió de lleno a observar cada detalle de los interiores. A pesar que la gran sala no ofrecía mayores puntos de interés, se dio medio día en buscar cualquier pista que le aclarara sus dudas. Ninguna.

Un poco molesta, ella se metió un rato a la cocina a prepararse un café para despejarse un poco. Y al salir de la cocina para sorber su bebida en la sala, lo que vio hizo que soltase su taza derramando el líquido caliente en el piso. Sobre el centro justo de la sala, se veía una formación nubosa blanquecina, del cual fue emergiendo una mata de cabello negro y del cual se formó el mismo rostro redondo y de ojos oscurísimos que hace algunas noches había permanecido a milímetros del rostro de María. El espectro que aterrorizó y casi provocó la huida de la ocupante de este caserón. Pero esta vez el espectro no se movía. Permanecía flotando, con un rostro expectante, como si esperase una respuesta de la paralizada María. Esta, agarrada del dintel de la puerta, sólo atinaba a observar con los ojos desorbitados aquella manifestación de ultratumba. Pero la falta de acción del espectro femenino fue otorgándole algo de seguridad y finalmente, venciendo su miedo, pudo articular palabra.

- ¿Quién eres? ¿De dónde vienes? – Dijo con voz ronca por la sequedad de su boca. Vio que el fantasma abrió lentamente su boca y mientras una prolongación de su cuerpo señalaba una de las puertas cerradas con llave, María oyó en ese tono cavernoso y sombrío, pero ya habitual:
- … A LA BIBLIOTECA… - luego de decir esto, el espectro se disolvió en el aire. María buscó con sus ojos el lugar señalado por el brazo del espectro, el cual era una puerta que por sus múltiples candados nunca había podido abrir antes. Y más por pereza que por otra cosa. Pero esta vez, nada la iba a detener.

Luego de limpiar el café derramado y los pedazos de cerámica desperdigados en el suelo, María miró la vetusta pero sólida puerta de madera reforzada con barras metálicas y pernos gruesos. Tres oxidados candados impedían la apertura de la puerta. Logró encontrar una pesada barrena en una de las bodegas, el instrumento idóneo. Resoplando mientras cargaba la barra metálica se dirigió nuevamente a la puerta sellada. Levantó la barrena con toda la fuerza de sus brazos y descargó un violento golpe contra el candado más elevado, quien saltó por los aires partido en dos. María sonrió por su primera victoria. Asestó un nuevo golpe al segundo candado, pero éste resistió el ataque. Tuvo que propinar una docena de golpes hasta que por fin el metal lograse ceder y el candado cayera. Tras reponer aire un rato, atacó el último seguro. Esta vez tuvo que luchar casi una hora golpeando, forcejeando y tironeando, entre quejidos, maldiciones y algunas lágrimas al acalambrarse sus dedos por tanto aferrar la barra. Finalmente, luego de un golpe casi lánguido, el candado se partió en dos y la puerta estaba lista para ser abierta. María tuvo que soltar su arma y correr a la cocina para lavarse un poco. Ahogando gemidos de dolor, vio sus manos mientras las enjuagaba en agua fresca. Diversas escoriaciones y ampollas habían aparecido en sus palmas y sus dedos, mientras un espeso dolor le empezaba a subir por sus antebrazos y brazos hasta atenazarle los hombros. Agotada por completo, María se dirigió a su cuarto, logró bañarse dificultosamente y cayó rendida en su cama, durmiéndose inmediatamente.

Mientras María dormía profundamente, se escuchó un nuevo susurro, que ella ya no escuchó: ESTÁS TAN CERCA, TAN CERCA…

Al día siguiente, María se levantó con un tremendo ardor de sus brazos por el ejercicio de ayer. En verdad se sentía excitada por su aventura. Dejando aparte el temor que le producía esa pálida aparición, estaba más decidida que nunca a descubrir respuestas. Así que luego de comer algo, se dirigió a abrir la puerta. Nuevamente tuvo que emplear toda su fuerza para lograr mover los carcomidos goznes, quienes luego de un rechinar rasposo dio paso a María a un cuarto profundo que se llegaba por una escalinata de piedra. Este cuarto ni siquiera tenía iluminación eléctrica, cosa que tuvo que regresar por una linterna. Ya con la linterna encendida, descendió las escaleras.

Ante sus ojos se mostraron varios anaqueles construidos en hierro colado, todos de hacía por lo menos dos siglos, a juzgar por el descascaramiento del esmalte, el estilo de su construcción y las bultosas telarañas agolpadas. Era un cuarto de aproximadamente cinco metros cuadrados, con cuatro libreros metálicos repletos de diversos volúmenes encuadernados en piel, que estaban tan escasamente separados los anaqueles, que María tenía que pasar de lado para darse cabida entre los espacios. Quedó pensando por un rato que demoraría años en leer todos los libros en aquel cuarto sellado, mientras la luz de su linterna iluminaba diversos lomos y títulos, algunos en castellano, otros en idiomas extraños.

Cuando pasó la luz por el último estante, vio repentinamente la conocida figura pálida. Curiosamente, el haz de luz al tocar el espectro, provocó el mismo sobresalto en ambas. Algo cayó al suelo mientras el espectro se desvanecía. María cada vez más acostumbrada a la bizarra visión, escudriñó el suelo donde se posaba el fantasma y vio una encuadernación muy polvorienta y gastada. Era como si el fantasma hubiera estado aferrando dicho documento antes de volatilizarse. Intuyendo una clave importante, María abrió el registro.

“A veces extraño aquellos días en que, en la soledad de mis aposentos, jugaba con cientos de muñecas a las que arrancaba el cabello con peines de despiojar mientras una niñera fantasmal, invisible para el resto, me cuidaba de los otros espectros que rondaban el palacio.
Mi madre, la Reina, gritaba mangoneando mi pequeña y delicada mano, escupiendo vituperios nada propios de la rosada boca de una elegante soberana como ella, insinuando que yo, su hija de ocho años, estaba loca; mientras corría a la juguetería real a adquirir otra muñeca igualita… o mejor.
¿Acaso no se daba cuenta que las detestaba?
En fin, otra cabellera que desmadejar, otra cabeza que cortar, otro rostro para perforar… más entretenimiento.
“Déjala que haga lo que quiera”, me decía mi niñera invisible, “así acalla las voces de su cabeza que le gritan sus carencias hacia ti por sus innúmeros compromisos en la corte”
….
¿De dónde vienes? ¿En tu reino hablan así de raro?
Ah sí, en mi reino.
¿Me enseñarías tu lenguaje?
¡Claro! Ven escucha esto.
….
¡¿Al calabozo real?! Señor, huya por favor.
Aun no se ha vuelto a saber de él. ¡Maldita profesora de ballet entrometida!
¡Ya no quiero ser princesa!
Pero un titulo debes tener.
¡Huiré del reino!
¿A dónde?
Mmm… mapa, mapa, mapa. Libros, libros, libros. ¡Moldova! Suena bonito
….
¡No soy una princesa, soy una Baronesa y puedo comer y puedo escuchar la música que yo quiera, y me puedo pintar los ojos de negro si me da la gana y me puedo vestir de negro si yo quiero!
¡Sí, pero no en mi palacio!
¡Maldita Reina!
¿Por qué lees mis cosas? ¡El diario de una Baronesa es prohibido a los ojos de los demás aunque seas una Reina!
La Reina grita y el Rey llora; el gato real se espanta y sale corriendo por la puerta de la calle y a mi hermanito no lo dejan acercarse a mí. Eso es lo que más me desespera.
Le dije a ella que no leyera mi diario ¿Todas las Reinas son así?
¡Yo no quiero ir a ese lugar!
Es un palacio nuevo.
¡No es un palacio, yo sé lo que es y no quiero ir. Padre, no quiero ir!
Es por tu bien, mi amor.
….
Mi principado sigue siendo un lugar oscuro y tenebroso, donde solo la luna alumbra, pero a mí me gusta así porque es tranquilo y no hay reinas locas gritando todo el día…Aquí en esta elevada torre, estoy segura de ellos, de sus realezas, sus estupideces, sus boberías…”


Lo que tenía ante sus ojos, era un diario. Un diario escrito a través de por lo menos diez años seguidos. De una princesa con el título nobiliario de baronesa. Una joven que en su tiempo tuvo en su escencia el perfume de la rebeldía, de la oposición a lo establecido. Una protestante a su destino. Que en pago recibió dolor, desprecio y sanciones diversas. Luego de leer por un largo rato, sintió la chica cómo corrían algunas lágrimas por sus mejillas. Una que se rebeló ante lo establecido, tal como ella solía hacer. Una amante de lo oscuro y lo sombrío, tal como ella. Es como si hubieran nacido bajo la misma estrella. El diario era su doloroso testimonio de su pasar en el mundo, sólo sazonado con la alegría de sus efímeros momentos de libertad, pero pese a todo, sin terminar de encajar por completo. Todavía conmovida, revisó hojeando las últimas notas del diario. Se dio cuenta que terminaba abruptamente, como si de repente le hubieran arrancado la pluma de las manos. Leyó con más atención los últimos párrafos.

Mientras tenga este diario y algo de tinta, seguiré escribiendo. Por fin supe el motivo de tanto encierro y aislamiento. Soy parte de una viejísima tradición, que provocó la expulsión de mi estirpe de su lugar natal hace centurias, y tras haber pasado el tiempo, se ha logrado completar los componentes para cumplir ese rito, siendo yo uno de ellos. El rito de la reunión, según pude investigar, está destinado a revertir todo al origen primigenio. Todo volverá a lo amorfo, a lo vacuo, para ser creado nuevamente. Hoy es el día del ritual, pues, así que vaticino que serán mis últimas palabras escritas. Los guardias están ya subiendo por las escalinatas de mi torre, prestos a llevarme a donde será el encuentro con mi destino. Yo, la portadora de la esencia de NYX, habré de reunirme con mis contrapartes, EREBUS y PROTOGENOS para otorgar el renacimiento de…

Esas fueron las últimas palabras leídas. María quedó pensando en dichos nombres. Erebus…¿dónde lo había escuchado? ¿No había sido usado tal nombre como una amenaza por aquella mujer? ¿Y porqué había provocado tal horror en ese niño? Apretando el diario contra su pecho se levantó la joven y nuevamente miró al espectro. Lucía agitada y esforzada. Antes de que María lograra formular una pregunta, de las miles que quería hacerle, el fantasma de la Baronesa señaló un grueso tomo, antes de desvanecerse de nuevo.

- Aquí… - Dijo, mientras se volvía a desmaterializar. María notó que era como si con cada materialización la baronesa forzara su energía más y más. Por consecuente, todas sus apariciones anteriores no fueron para correrla de la mansión, si no para enseñarle y advertirle de lo ocurrido. ¿Pero porqué ella? ¿Será por la coincidencia en sus gustos y personalidad? ¿O por otra razón?

Aliviada de que por lo menos no pasaría interminables días buscando entre todos los libros las respuestas apropiadas, la chica agarró el grueso tomo encuadernado en madera y metal, con diversas cinchas de alambre, como sellos colocados para impedir que su conocimiento fuera revelado a ojos inexpertos. Luego llevar el libro a la sala y hacer saltar los seguros, María escogió una página al azar y empezó a leer.
Κωμάσδω ποτὶ τὰν Ἀμαρυλλίδα, ταὶ δέ μοι αἶγες βόσκονται κατ᾽ ὄρος, καὶ ὁ Τίτυρος αὐτὰς ἐλαύνει…
- ¡Mierda, maldita sea! Esta pendejada está en griego! - gritó molesta al toparse con un obstáculo que ya no consistía en barreras físicas sino de idioma. – si por lo menos estuvieras en inglés.. – de cualquier modo, esperando lograr alguna comprensión aunque sea por las gráficas, ella siguió leyendo:
Τίτυρ᾽, ἐμὶν τὸ καλὸν πεφιλημένε, βόεσκ τὰς αἶγας, καὶ ποτὶ τὰν κράναν ἄγε, Τίτυρε, καὶ τὸν ἐνόρχαν, τὸν Λιβυκὸν con κνάκunωνiónα, tres deφυλdaάσσdesεο vμήan τaυ forκορύψῃmar al que fue el oriΛgen, el que de su intωνerior salió todo…

- ¡¡¿¿EEEHHH??!! ¡¡Puedo entender esto!! ¡Puedo entender el griego! ¿Pero cómo.. por qué..? – Balbuceó estupefacta mientras las letras, antes un galimatías incomprensible, formaban ahora frases perfectamente inteligibles, como si leyera un texto en inglés sin mayor dificultad. Un suspiro helado al lado suyo la sacó de su asombro. Y al voltear el rostro, vio el rostro de la baronesa. Envolviendo su ectoplasma en su cuello. Ahora ya no sintió miedo alguno. Así que empezó a replicarle cómo y porqué de muchas cosas, pero al momento, casi con un rictus de sufrimiento, la baronesa le ordenó.

- Sigue… por favor, sigue leyen…do…

Consciente que por la influencia de la baronesa era que lograba comprender todo lo escrito, y que dicha capacidad mermaba la capacidad de materializarse del espectro, María apuró lo más posible el texto mientras durase su habilidad prestada. Varios párrafos leídos, acompañados de imágenes de seres de panteón griego pasaban por sus ojos a toda la velocidad que se permitía.

“ Nosotros, los que finalmente nos hemos hartado del aparente orden y lógica del mundo actual, hemos sido expulsados de nuestra tierra de origen luego de haber cumplido rituales basados en procedimientos de eones de antigüedad, de cuando los dioses cohabitaban con sus hijos terrenales. Tales prácticas, por manejar poderes que la mayor parte de los mortales considerarían imposibles de controlar, fuimos declarados blasfemos, muchos fuimos ejecutados y el resto, condenados al exilio. Cruzamos mares y océanos y casi al costo de nuestra vida, llegamos hasta una tierra nunca antes vista. Sintiéndonos favorecidos por nuestro principal adorado, reconstruimos nuestra comunidad, y de los que conocíamos las palabras sagradas y los rituales, conformamos una familia de élite. Nosotros, los Eginios, sobrevivimos a pesar de los esfuerzos de los demás para borrarnos de nuestro mundo. “

“ El ritual es una combinación de muerte y vida, de separación y unión, de sacrificio y recompensa. Tres fracciones se volverán una y esa unidad reabsorberá todo dentro de sí, acabando con lo establecido y lo creado, para volverlo a crear nuevamente, esta vez impoluto, puro, sin errores pasados ni falsas expectativas. Tres formarán uno, reuniéndose más allá del lazo carnal…”

“Por la tozudez de nuestra Baronesa, quien hasta el último momento mostró rebeldía ante la tradición de su sangre y su destino, fue que el ritual fracasó. Tanto sacrificio para nada, tanto esfuerzo en balde. Mas sabemos que su alma no logrará encontrar reposo hasta que haya cumplido finalmente con su hado. Por tanto quedará atada a este terreno, a este castillo devastado por el ritual fallido, hasta que nuevamente se dé las condiciones propicias para rehacer el ritual. Mis hijos y los hijos de mis hijos, serán los responsables de aguardar tal momento, y llegada la hora, sabrán actuar, con las instrucciones pasadas verbalmente. En secreto.”

“Estoy en el borde de volver al vacío al cual pertenezco, viendo la construcción de la mansión que será el recuerdo principal de lo acaecido a nuestros descendientes. El castillo ha sido cubierto con tierra para simular un montículo y sobre su cima se alzará la mansión que para la persona indicada, será la llave que abra nuevamente la puerta al cambio final. La puerta de la habitación señorial, indicará el lugar que conecte lo nuevo con lo antiguo, y es median
εσκ ποτὶ τὰν Ἀμαρυλλίδα…”

- ¿Qu—qué pasó? Ya no entiendo nada nuevamente. ¿Baronesa? ¿Baronesa? – María buscó a su alrededor buscando el rostro pálido mas su ausencia completa fue lo único que logró encontrar. La baronesa había empleado toda su capacidad de materialización para lograr comprensión de lectura del griego en María, hasta agotarla. Por fortuna, había logrado captar gran parte del texto, y muchos misterios se estaban ya aclarando. Ahora sólo quedaba uno. El que escondía la puerta de la habitación señorial, como había leído.

Así que luego de lanzarse casi corriendo al portal de su habitación, enfocó toda su atención en todas las filigranas, los posibles resquicios, algún compartimento secreto, textos ocultos, cualquier cosa que le indicara el cómo terminar en el fondo de lo que había empezado desde la aparición en su computadora de ese ojo negro y desorbitado.

Dos horas. Nada. Nada que satisfaciera su sed de conocimientos. Se alejó un par de pasos de la puerta, la miró furibunda y presa de la ira, pateó con fuerza el suelo. Para sorpresa suya, en vez de sonar con el mate típico del mármol, oyó un retumbo hueco y sordo, como un vacío bajo sus pies. Nuevamente miró la puerta. Las figuras de los dos espectros torvos que apuntaban sus manos hacia abajo. Relación, comprensión y conclusión. ¡Pero claro! María empezó a tantear todo lo que pudo hasta que en la saliente del piso, empezando la escalera, halló una como abertura, cubierta por la espesa alfombra. Fueron varios minutos de tironear y forcejear hasta desnudar el mármol de su abrigo rojizo. El piso que estaba en el escalón final antes de la puerta se veía como una lápida. Así que aferró la lápida con ambas manos y jalando con las fuerzas que le otorgaba la excitación y su adrenalina, comenzó a aparecer un orificio cuadrilátero. Más y más grande. Luego de cambiar de posición para no caerse y lastimarse, María siguió pujando más y más hasta que la losa quedó despegada por completo y se precipitó escaleras abajo. Y en la hondonada apareció el inicio de una larga escalinata. La entrada al antiguo castillo. Ya esto era demasiado para afrontarlo sola. Se precipitó a su habitación y llamó a su novio. Tenía que enterarse de esto. Tras ponerlo al tanto en menos de diez minutos, el muchacho se comprometió a salir en su auto y volar hasta donde estaba ella. Si lograba revelar tal misterio, sería uno de los hallazgos arqueológicos de la centuria.

Tras colgar el teléfono, María decidió que necesitaría más ayuda. Salió presta de la mansión y fue directo a avisarle de la situación al teniente político.
- … así que luego de jalar la lápida que daba a la puerta de mi habitación, ¡surgió una escalinata, la misma que ha de terminar en el antiguo castillo! ¡Hay que avisar a las autoridades de este hallazgo! – decía presurosa María embriagada de ansiedad y gozo por haber resuelto el enigma.
- En verdad estoy sorprendido, profesora, nunca pensé que bajo esa loma se guardase un castillo de hace trescientos años. Yo opino que lo mejor es que vayamos no sólo yo, sino un grupo de vecinos, para protegerla. Quién sabe lo que podremos hallar ahí abajo. Ya he de notificar a las autoridades, quienes llegarán lo más pronto posible. ¡Vamos entonces! – respondió el teniente.

En poco rato, un casi la mitad de la población subía la cuesta rumbo a la mansión. María los lideraba. Todos con linternas y hachones apagados, para ir iluminando el camino. Mientras subían las escalinatas, María sintió un efluvio de cariño y alivio, hacia la fantasma que al principio tanto la había aterrorizado. Era lo que ella había querido, que se revelen estos misterios, y para que finalmente su alma descansara en paz. Hubiera querido ver su rostro, adivinando su expresión de felicidad antes de ascender a los cielos…

Ya con las linternas encendidas, empezaron a bajar por la escalinata que a pesar del tiempo aún lucía sólida y bien conservada. Se dio cuenta que la escalinata luego de bajar un par de metros, bajaba en una habitación pequeña pero aún conservando detalles que decían que ahí había vivido una mujer. Una baronesa. Restos de telas caras, algunos muebles muy elaborados y sobre todo muchas mariposas negras disecadas. La habitación donde la baronesa había sido recluida tanto tiempo. Un estremecimiento recorrió a María de arriba abajo. La puerta principal estaba carcomida así que fue sencillo apartarla. Una nueva escalinata, más profunda esta vez.

Siguieron bajando más y más, hasta que finalmente llegaron a lo que en su tiempo había sido un gigantesco balcón que daba a una explanada muy amplia, en cuyo suelo de piedra se mostraba claramente, aunque cubierta de hongos y líquenes, diversos bajo relieves en griego. Y en el centro se hallaba una enorme piedra negra cilíndrica en la que bien podían sentarse hasta cinco personas sin apretarse. Un lugar de rituales. El ritual del que se hablaba podía haberse celebrado ahí. Mientras veía a las personas, evidentemente tan excitadas como ella por el descubrimiento, dirigirse a diversos lugares de la explanada, por la luminosidad de las antorchas, observaba que las murallas del castillo, llegando incluso a los portones principales, estaban casi arrasados, y no por el tiempo, sino como si algo como una explosión lo hubiera barrido. Por primera vez extrañando al espectro de la baronesa, quien hubiera deseado tener a su lado, descendió hasta el lugar donde reposaba la piedra. Empezó a verla de cerca, observando atentamente la miríada de caracteres griegos cuando sintió una mano en su hombro. Era el teniente político, acompañado del alcalde. Ambos lucían una amplia sonrisa en sus rostros.

- Profesora, le estamos infinitamente agradecidos. Usted ha logrado descubrir lo que en tanto tiempo estuvo escondido. Ha traído usted una bendición a nuestro pueblo, a nuestra gente. Nunca podré agradecérselo lo suficiente.
- Fue un placer – sonrió María visiblemente sonrojada – este misterio me intrigó profundamente, y decidí no descansar hasta dar con el fondo del mismo, y mire usted dónde acabamos. Ahora es cuestión de esperar a la prensa, a los centros de arqueología y este pueblo cobrará una fama espectacular. En verdad lo merece…
- Claro, habrá ya tiempo para eso. Hasta mientras, profesora, ¿quisiera por favor colocarse encima del pedestal? Estoy seguro que querrá inmortalizar este hecho con una foto… - dijo melosamente el alcalde. María accedió gustosa. Mientras se trepaba en el pedestal y ponía sus brazos en jarras, vio al alcalde alejarse con la cámara en la mano hasta salir del círculo encriptado. Ojalá no salga muy lejana y oscura la foto, pensaba María, cuando, para su extrañeza, el alcalde bajó la cámara y dijo con voz cavernosa.

- Profesora, no necesitaremos ni prensa, ni arqueólogos, ni nada proveniente de este mundo corrompido, vil y decadente. Hoy es el principio del fin, de volver a cumplir el objetivo que hemos estado peleando por tantas centurias. El mismo objetivo que fracasó hace trescientos años por la rebeldía de la encarnación de Erebus diosa del espacio infinito, pero que finalmente se cumplirá hoy, gracias a tu llegada. ¡La llegada de la deidad de la noche oscura, de NYX! - María miró estupefacta al alcalde y al teniente, y vio asimismo que las otras personas del pueblo se arremolinaban en el borde del círculo de piedra, cada uno con un hachón encendido mientras coreaban palabras en griego, de las cuales María sólo podía comprender dos: NYX, EREBUS, NYX, EREBUS.

Justo al momento de empezar a protestar y querer bajar del pedestal, éste se iluminó de rojo sangre y los destellos rojizos engarrotaron las piernas y progresivamente el resto del cuerpo de María hasta quedar ella parada, con ambos brazos extendidos y el rostro con la boca abierta mirando al cénit. Ella ahora presa de un terror inimaginable, encontró que toda orden para liberarse y luchar contra esta luz rojiza era simplemente inefectiva. Su vista sólo podía abarcar el cénit en penumbras de lo que fue el castillo hace siglos, y sus oídos no podían más que oír la interminable letanía en griego de los habitantes del pueblo. No podía gritar, ni siquiera suspirar. Sólo sentía cómo el aire, súbitamente helado secaba la mucosa de su boca al respirar ferozmente ella. Luego escuchó la voz del alcalde.

- ¡Nyx, señora de la noche, Erebus, dueña del espacio infinito! ¡Tomen nuestra fuerza vital como sacrificio de vuestra unión! ¡Que lo que estuvo roto, se otra vez! ¡Que regrese lo amorfo, sin cabeza ni pies! ¡Que de su unión surja la que a su vez se combine con la esencia de PROTOGENES y finalmente, se dé el advenimiento a este mundo de nuestro amo y señor! ¡Que finalmente renazca el reductor a la nada, el corregidor supremo! ¡¡QUE VUELVA A NUESTRO MUNDO KAOS, EL PRIMIGENIO, EL VACÍO INFINITO, EL DIOS DE LA NADA!!


Y sobre un par de metros de la paralizada María, se empezó a arremolinar un vapor blanco, que tomó la forma de la Baronesa. Y esta vez, con una expresión de alegría salvaje. La misma expresión que había anhelado María con anterioridad, pero no de esta manera… Pero simultáneamente, el terror que la gobernaba fue sucumbiendo ante una rara euforia, como si estuviera frente a un ser que había amado tanto tiempo (Yo soy la noche), alguien que había formado parte integral de ella hacía eras y que la habían separado (toda criatura nocturna me obedece. Servidme, seres alados de oscuridad) ahora volvía a ella, para volver a formar una unidad, eso sí incompleta aún (YO SOY NYX. YO SOY NYX. SOY PARTE DE KAOS, JUNTO A EREBUS Y PROTOGENES) .Y que cuando se reuniera con la última parte, con el principio creador, con Protogenes, renacería el señor del vacío, a terminar con este mundo y crear algo nuevo. A renovar el ciclo. Tales pensamientos formaron una sonrisa en su boca abierta mientras el espectro de la baronesa se embutía a través de su boca, mientras los habitantes del pueblo se sublimaban en millones de chispas multicolores y formaban un remolino luminoso para dar fuerza a tan increíble unión. El corolario final lo dio el alcalde, mientras era desintegrado para formar parte del sacrificio:

- ¡Nyx y Erebus se han convertido en una sola! ¡Y cuando encuentren al que albergue la escencia de Protogenes, de la fusión de los tres resurgirá el que cantará la obertura del final del mundo! ¡Todos volveremos a él, todos formaremos parte del infinito vacío, de la gran nada llamada Kaos, para que resurjamos como seres superiores! ¡Ha llegado el principio del fin de esta era…!

Finalmente, un estallido, un vendaval, y un profundo silencio.

María lentamente abrió los ojos. Estaba apoyada en el pedestal del ritual, aunque ahora podía ver claramente el bosque y el día que empezaba. El estallido había logrado barrer con todo, incluyendo el montículo y la mansión. Al ver a lo lejos, pudo ver asimismo el pueblo compeltamente arrasado, sin ningún signo de vida. Era como si todos los del pueblo hubieran sido sacrificados para dar lugar a la reunión. María no sintió pena ni remordimiento. Lo sabía todo ya. ¿Para qué lamentar el inicio de lo inevitable? Vio un trozo de espejo cerca de ella. Aún conservaba algo de vanidad femenina así que se echó un vistazo. Casi ningún cambio. Casi.
Su ojo izquierdo ahora mostraba una pupila completamente azabache, en contraste con el caoba claro de su ojo derecho. Prueba innegable de su unión. Ya no era María. Ya no era la Baronesa. Ni siquiera Nyx o Erebus. Ahora era dos tercios de la unidad. En búsqueda de la tercera. Escuchó un motor a lo lejos. Entre los recuerdos de María, pudo relacionarlo con algo como "novio". Mejor era ser cauta. Desgarró algo de su vestido y lo ciñó a su rostro para taparlo. Hasta mientras. Mientras encontrase a Protogenes.
- ¿Dónde estás, Protogenes…? – susurró mientras el carro frenaba a raya a unos metros de ella, y el novio de María se precipitaba a abrazarla.

Ella, simplemente sonrió.